COFRADÍA DE LA INMACULADA

Real Hermandad y Cofradía de nazarenos de la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María y San Luis Gonzaga.

ESCUDO:

HÁBITO:

HISTORIA DE LA PENITENCIAL:

La historia de esta cofradía santanderina se remonta a abril de 1944. Fue fundada por congregantes y seglares marianos, (principalmente Luises y Jesuitas), entorno al céntrico barrio de Santander en el que se emplaza la magnífica y el espléndido conjunto de la iglesia parroquial del Sagrado Corazón de Jesús, (PP. Jesuitas). Desde su fundación en los años cuarenta, ha establecido su sede canónica en diversos emplazamientos de la ciudad, siendo la penitencial que más ha cambiado de sede parroquial. Desde 1944, y hasta 1975, sus funciones administrativas se establecieron en la susodicha parroquia de los Jesuitas. Más tarde, desde 1976 hasta 1979, estuvo asentada en la iglesia parroquial de Santa Lucía, y desde 1980 hasta nuestros días, en la parroquia del Carmen y Santa Teresa. Además, distribuye sus imágenes procesionales, (cuatro en total), en diferentes parroquias. El Cristo Yacente y El Señor de la Misericordia, por ejemplo, residen expuestos al culto en las naves laterales de la parroquia de San Francisco; Jesús ayudado por el Cirineo, se guarda durante el año ajeno a la exposición y visitas de fieles, en las dependencias de la parroquia de Santa Teresa y el Carmen. Su titular, la Virgen Inmaculada dolorosa, se expone al culto durante todo el año, (aunque con diferente vestimenta y decoración), en la iglesia parroquial de San Roque, en el Sardinero. Tras su fundación en 1944, fue adquiriendo durante los años venideros las piezas e imágenes que configuran actualmente su conjunto de patrimonio artístico religioso, aunque no fue hasta 1993 cuando adquirió de manos del escultor sevillano Carlos Valle Hernández su actual Virgen titular... La Virgen Inmaculada Dolorosa. Desde su fundación, su hábito no ha variado pese a las numerosas transformaciones de la hermandad... Es considerada como una de las penitenciales con más patrimonio de Santander, debido a la riqueza artística de muchas de sus obras. Además, cabe destacar que una de las facetas más apreciadas de la Hermandad es sin duda las banderas, guiones, y estandartes que esta posee. Su riqueza, sus bordados, sus colores, sus símbolos, su historia, representan elegantemente el espíritu solemne y conservador de amor y afición por el arte y la religiosidad, que esta mítica Cofradía supone. Actualmente procesiona dividida en secciones normalmente, los días de Domingo de Ramos, Martes Santo, Jueves Santo, Viernes Santo, y Domingo de Resurrección.

PASOS:

- El señor de la misericordia: Emotiva y antigua efigie de 1925, del escultor catalán José Reixa, para la Semana Santa santanderina de dicho año. No fue el único modelo que se utilizó para representar este momento de la pasión de Cristo, en el que la cruz es portada por el hijo de Dios, durante la dolorosa subida al Gólgota. Anteriormente, hubo diversas otras imágenes similares a ésta. El primitivo “Cristo de la Cruz a cuestas”, por ejemplo, fue tallado por el escultor Juan de Palazuelos Herrera, de Camargo, para la Santanderina Cofradía de la Vera Cruz en 1.626. En 1.911 fue sustituido por uno nuevo, magnífico, de Lorenzo Coullaut Valera, al que destruyó el fuego de San Francisco en 1.920, obra que había sido contratada por la Orden Tercera, la misma que encargó el actual, cuyo costo pagó una donante anónima. Es de vestir y se cubre con riquísima túnica de terciopelo morado bordada en oro. Bellísimo y patético rostro, excelentemente tallado, así como las manos. Popularmente conocido por “Cristo de las Melenas”, al ostentar peluca de cabello natural. Desde 1.996 el trono de esta imagen se complementa el día de Viernes Santo con la efigie de una Dolorosa de vestir, donada por una comunidad religiosa de Madrid, que antaño desfilaba en las procesiones de la capital. Unidas ambas esculturas, constituyen el paso conocido como “El encuentro”.

-Jesús ayudado por el Cirineo: Este magnífico grupo en madera tallada es de gran monumentalidad y dramatismo. Diseñado ex-profeso por el escultor de las Escuelas Sr. Coscolla, fue realizado con el concurso de los discipulos. Encargo de la desaparecida Cofradía de las Angustias, iba a completarse con las figuras de la Virgen, San Juan y la Magdalena, lo que nunca se hizo. Estuvo en la Parroquia de la Anunciación hasta 1.969, y fue entonces trasladado al Museo Diocesano de Arte Sacro (Santillana del Mar), el cual lo devolvió a Santander cuando decidió procesionarlo la Hermandad de la Inmaculada (1.989), tras 36 años sin desfilar. En los últimos años y debido en gran parte a la falta de nazarenos, este paso es prestado a la Hermandad de la Salud, (cuyos colores son parecidos a los de los faldones del paso), para sacarlo en procesión durante los días de Jueves y Viernes Santo, debido también a la mayor cantidad de nazarenos que esta última penitencial posee.

-El Cristo Yacente: Una de las más bellas, artísticas y solemnes tallas de la Semana Santa Santanderina. Fue tallasdo por el sevillano Lorenzo Coullaut Valera en 1923, para dicha Cofradía. El antiguo Yacente, que procesionó desde el siglo XVII en el desfile de Viernes Santo, era obra de escaso mérito que se llevaba dentro de una urna. En 1.914 estrenó la Orden Tercera uno nuevo recién tallado por Coullaut Valera y que habia sido presentado en el Salón Lacoste de Madrid, momento en que comenzó a cosechar innumerables elogios de especialistas que lo saludaron como “obra maestra de la escultura española contemporánea” en la prensa madrileña y luego en la santanderina. Se completaba con un bello ángel lloroso. Destruido por el incendio de San Francisco en 1.920, Coullaut lo repitió con exactitud en la versión actual, aunque prescindió del ángel. Es, sin duda, una escultura de perfecta hermosura, llena de augusta serenidad e intenso, aunque contenido, dramatismo. Actualmente es portado a hombros por 12 costaleros el día de Viernes Santo, sobre un sobrio y sencillo trono negro con faldones bordados con el emblema de la hermandad. Recientemente, en 2015, fue restaurado completamente. 

-Stsma. Virgen Inmaculada Dolorosa: Esta bella imagen es la primera de escuela andaluza que se suma a la Semana Santa de Santander. Obra del escultor Carlos Valle, la realizó en su taller de Sevilla entre mayo y noviembre de 1.993, policromándola magistralmente su hijo Tulio Valle Fajardo. La preciosa corona se debe a la firma “Orfebrería Andaluza”, dirigida por Manuel de los Ríos. El autor de la talla cuenta con abundante producción en imaginería, sobre todo de pequeño tamaño, repartida preferentemente por las provincias del sur de España, Sevilla en especial. Desfila sobre sencillas andas sin marco, con faldones azules bordados. Su precioso manto azul de grandes dimensiones, lleva bordados los emblemas de la hermandad fusionados con el escudo nacional y numerosas estrellas y bordados decorativos en hilo de oro. En las esquinas del trono porta dos angelotes que a su vez soportan dos candelas, que simulan consolar a la Virgen.

GALERÍA FOTOGRÁFICA:

VÍDEO:

-En el siguiente vídeo, podrán observar uno de los tramos procesionales de una de las tallas procesionales de La Inmaculada; "El Cristo Yacente", que en el momento de la breve secuencia que os presentamos, atraviesa una de las principales arterias del centro de Santander...

                                                                               

NOVEDADES 2015:

-Con respecto a las novedades de esta Hermandad, podemos adelantar que durante los meses previos a la Semana Santa de Santander de 2015, la Cofradía de la Inmaculada inició un proceso de restauración total de su "Cristo Yacente", el cual estaría listo para la Semana Santa de dicho año. Se le suministró un aclarado de tono de piel, restaurando el pigmento principal y resaltando los gestos de la talla. La base, y la sábana, también fueron restauradas, tras un proceso de aclaramiento. Tras el laborioso proceso, el Cristo, ya muy deteriorado por su antigüedad, recuperó su tono de piel original y su brillo primitivo.  Las responsables de su limpieza y recuperación han sido las especialistas Verónica Salas Casar y Marta Fernández Carral.

ANTES: (Fíjense en el tono del torso)...

DESPUÉS:(Fíjense de nuevo en la yaga)

ARCHICOFRADÍA DE LA MERCED

Archicofradía de la Celeste, Real,y Militar Orden de Nuestra Señora de la Merced.

ESCUDO:

HÁBITO:

HISTORIA DE LA PENITENCIAL:

La historia de la segunda cofradía penitencial más antigua de Santander, la Archicofradía de la Merced, se remonta a mayo de 1942, aunque cabe destacar que comenzó a organizarse después de la guerra civil. Estuvo integrada en un principio por prisioneros de la guerra, los cuales establecieron un escudo y hábito propio de acuerdo a la heráldica y símbolos de la advocación católica a la cual pertenecían; la Orden de la Merced. Esta serie de hechos primitivos, como el origen de los primeros congregantes, provocaron que años más tarde, le fuera concedida a la hermandad el título honorífico de Celeste, y Militar. Se trata además de la primera penitencial de España formada por ex cautivos de la guerra civil. Desde un primer momento tuvo su sede canónica en la pequeña capilla de Nuestra Señora de la Merced, en la calle Bonifaz de Santander. Es importante señalar que uno de los momentos más destacados de la procesión de miércoles santo, en la que la hermandad recorre las principales arterias del centro urbano Santanderino, se produce cuando, ya montadas las dos efigies titulares sobre sus andas, los costaleros sacan desde el interior de la capilla las imágenes, con una perfección y precisión milimétrica indescriptibles, que pone de manifiesto el esfuerzo y dedicación de los cofrades, al hacer pasar las andas de los pasos aprovechando las estrechas dimensiones de la puerta principal. Una de las costumbres más arraigadas dentro de la Archicofradía, es la de portar un cubre rostro con guantes y cíngulo negro el día de viernes santo, en señal de luto por la muerte de Cristo, a diferencia de los demás días en los que procesiona, en los que sus cofrades llevan un hábito completamente blanco. Asimismo, ese día la virgen titular también porta un rostrillo azabache, ricamente bordado y decorado. A lo largo de varios años después de su fundación, cuando se crearon las demás penitenciales modernas, adquirió diversas piezas escultóricas de gran valor artístico, las cuales son procesionadas sobre esplendorosas andas de maderas nobles durante la Semana Santa. No fue hasta 2004, cuando la hermandad encargó a la artista local y también cofrade de otras hermandades, Gema Soldevilla, la genial talla de vestir de la Virgen de la Merced.

La penitencial procesiona los días de Domingo de Ramos, Miércoles Santo, Jueves Santo, Viernes Santo, y Domingo de Resurrección (acompañando al cortejo que se celebra paralelamente. Es decir, acompañando a la Cofradía de la Inmaculada y su Virgen Inmaculada Gloriosa, al encuentro con el Cristo Resucitado, al cual acompañan las demás penitenciales desde la catedral). El día de Miércoles Santo, cuando se celebra la Procesión del perdón y del silencio, la hermandad atraviesa las calles de la capital montañesa en uno de los cortejos más artísticos y solemnes de la Semana Santa. Como hemos dicho, lo primero que cabe destacarse es la salida a hombros del paso desde la capilla, pero a medida que la procesión avanza y llega a la cuesta de la subida Ruamayor, se produce otro momento de gran expectación, cuando, tras la pausada y elegante ascensión de la Virgen, los costaleros del Cristo afrontan la subida de una forma bruta, rápida, y agitada, al ritmo incesante de los tambores, con el consiguiente castigo para los hombros de los nazarenos... Dicha procesión hace su estación cumbre a su paso por los juzgados provinciales, donde años antes, al haber cerca una prisión, se liberaba a un preso. Actualmente, al no existir dicha prisión, se libera al reo en otra prisión de la provincia y se realiza el acto simbólico de su liberación en un solemne acto ya bien entrada la noche. Más tarde, comienza la vuelta a la capilla, en la otra punta de la ciudad. En 2017 celebrará su 75º aniversario.

PASOS:

-El Ecce-Homo: Esta magnífica y emotiva imagen fue realizada en maderas nobles por Andrés Novo Cuadrillero, para la Semana Santa de 1943, año en que la penitencial realizó su primera salida en procesión, portando a hombros esta imagen precisamente. Aunque fue esculpida en 1943, diversos motivos estéticos y de conservación, hicieron que la antigua talla fuera reformada por completo en 1948, por el propio imaginero cántabro. La cabeza del cristo fue cambiada de angulación y postura, pasando mirar hacia el infinito, levemente caída hacia la izquierda. La altura fue rebajada notablemente, y las manos y el gesto principal fueron definidos para aportar a la efigie una sensación de mayor naturalidad. Esta reforma fue finalmente terminada para la semana santa de 1948, año en que además la hermandad estrenó un nuevo vestido para el Cristo, el cual constaba de capa de terciopelo granate, y túnica blanca; todo ello sobre unas sencillas pero adecuadas y muy apropiadas andas que aportan a la imagen mayor particularidad y estética belleza.

El paso, actualmente, es portado a hombros por 12 costaleros, (con 3 recambios), y procesiona los días de Miércoles Santo, Jueves Santo, y Viernes Santo. Además protagoniza el momento de la abrupta, rápida, y agitada subida por la cuesta de Ruamayor.

 -La Piedad: Este espléndido conjunto imaginero, fue tallado y ricamente decorado por los alumnos de los Talleres "El arte cristiano" de Olot, en la provincia de Gerona; por un encargo de la Archicofradía de la Merced para la Semana Santa santanderina de 1946. La efigie de María, arrodillada y con un rostro melancólico observando la cabeza inerte y malherida de su hijo, sujeta por ambos brazos su cadáver, el cual, postrado sobre las rodillas de la madre, yace con expresión de muerte, aportando a la imagen una sensación de naturalidad y sentimiento indescriptibles. Una cruz de pequeñas proporciones de la cual pende un sudario, completa este magnífico grupo de efigies, las cuales han sido pintadas y decoradas con una singular y artística policromía, cuyos pigmentos son resaltados por las tenues luces de la candelería, que suele ir acompañada de coloridos centros florales. Las tallas descansan sobre andas de madera de roble, bastante similares a las de los demás pasos de la hermandad, y son portadas a hombros por hermanos cofrades durante la procesión del Santo Entierro, en Viernes Santo. El paso, el cual nos recuerda a la célebre y magnífica escultura en mármol de Miguel Ángel, (pues ambas tallas poseen gestos similares), fue escogido para representar a la Semana Santa de la villa montañesa en el cartel de la misma, en el año 2008.

La Stsma. Virgen de la Merced: La emotiva y magnífica talla de vestir de la Virgen de la Merced, titular de la penitencial, fue realizada por la artista local, Gema Soldevilla Fernández, para dicha cofradía en la Semana Santa de 2003, haciendo esta su primera salida en la Semana Santa Santanderina en 2004. Esta destacada artista, es cofrade de otras penitenciales de la ciudad, (procesiona con la Cofradía del Santo Entierro), y es también autora de obras como el Miserere que se canta durante la procesión de la Santa Misericordia durante la noche de Miércoles Santo. La Virgen, ataviada normalmente con un vestido blanco, y un rostrillo amarfilado con el emblema de la hermandad y varias cadenas y broches, (excepto en Viernes Santo), luce actualmente un elegante y vistoso manto ricamente decorado, que pende de la cabeza, siendo a su vez sujetado por la corona de plata que luce la efigie. Con respecto a la vestimenta de esta talla ha habido muchas variaciones durante los últimos años. En la capilla, durante el resto del año, (cuando la talla se expone al culto), se viste a la efigie con un sencillo aunque apropiado manto azul, con bordados azabaches; una túnica color burdeos, y un sudario que hace a la vez de cíngulo, de vivos colores. En 2011, la virgen lució un nuevo precioso manto color turquesa, que volvió a ser sustituido al año siguiente por el actual. Otros años ha portado otros mantos diferentes, (blancos bordados, color marfil, burdeos...). Durante el Viernes Santo de 2015, la Virgen lució un atípico aunque elegante y solemne conjunto, compuesto de túnica y rostrillo negros, y cíngulo y manto blancos. Todo ello con motivo de la conmemoración del  75º aniversario de la Cofradía de los Dolores. La talla descansa sobre unas andas realizadas en madera, muy parecidas a las de los demás pasos de la hermandad, y es portada a hombros por 12 costaleros, durante las procesiones de Miércoles, Jueves, y Viernes Santo. Luce también una espléndida y lujosa candelería de plata en las esquinas del paso. Ocupo la imagen del cartel de la Semana Santa de 2010.

GALERÍA FOTOGRÁFICA:

VÍDEOS:

En el siguiente vídeo, obtenido de fuentes externas procedente de youtube, les mostramos en una secuencia de fotografías acompañadas por música, el desarrollo de la procesión de Miércoles Santo de hace unos años..

NOVEDADES 2015:

Por el momento, no hemos obtenido información alguna sobre las novedades de La Merced para el 2015, pero durante los próximos días continuaremos informándoles aportando todas las noticias y novedades de esta penitencial. Continuaremos informándoles próximamente en cuanto podamos... 

COFRADÍA DE LOS DOLORES

Real hermandad y cofradía de nazarenos de los dolores gloriosos de Ntra. Madre la Santísima Virgen María dolorosa y San Andrés Apóstol.

ESCUDO:

HÁBITO:

 HISTORIA DE LA PENITENCIAL:

La hermandad de los Dolores fue fundada en Santander, entorno a la céntrica iglesia de San Francisco, habiendo ya acabado la guerra civil, en agosto de 1939. Se trata además de la más antigua de las penitenciales que actualmente desfila por las calles de la capital montañesa. También cabe destacar que en un primer periodo después de su fundación, estuvo integrada unicamente por hombres, que portaban piadosamente la efigie de la virgen de los dolores, su titular, ataviados con un cíngulo blanco, y una túnica y un cubrerrostro negros, sin la capa blanca que actualmente los distingue de otras hermandades. Durante esos primeros años, los congregantes, no iban acompañados de música, sino que recorrían las vías santanderinas en completo silencio. En 1940 procesionó por primera vez, acompañando a una talla de la Virgen María de la que cabe destacar una curiosa anécdota. Semanas antes de el inicio de la Semana Santa de 1940, año en que la cofradía realizó su primera salida, se comenzó a planear la organización de la nueva procesión de la Soledad, que tendría lugar en viernes santo. Habiendo dispuesto los cofrades todo lo necesario, surgió el problema de la falta de una imagen a la que procesionar. La talla encargada a Daniel Alegre para las procesiones de eses año, no llegaría hasta 1941, por lo que los organizadores modelaron en la propia sede y a toda prisa, una efigie de escayola, la cual pintaron y vistieron para poder llevar a cabo la procesión del día siguiente. 

Desde el mismo momento de su fundación, la Hermandad destaca por el riguroso silencio con que procesiona, siendo acompañada en la actualidad por miembros del destacamento del Cuerpo Nacional de Policía de Ávila, de prácticas en la comisaría de Santander. Años más tarde, fue añadida la capa blanca al hábito nazareno. Desde un primer momento tuvo su sede canónica en la parroquia de San Francisco, donde se exponen al culto de los visitantes sus imágenes procesionales durante todo el año, junto con otras tallas de diversas hermandades. Durante los años cuarenta, época de mayor apogeo de la Semana Santa en Santander, se fundaron la mayoría de las hermandades actuales. La cofradía de Los Dolores, ejerció como cofradía matriz y filial de 7 de estas cofradías, hecho que podemos verificar observando la indumentaria de estas, (La Paloma, El Descendimiento, La Esperanza, Los Dolores, La Humillación [actualmente desaparecida], y Las Angustias [actualmente desaparecida]), en la cuales destaca una túnica y cubrerrostro negros comunes a todas, y la capa y el cíngulo del color correspondiente a cada hermandad. Durante los años cuarenta y cincuenta incorporó a su patrimonio los 2 conjuntos escultóricos que desfilan acompañados de sus nazarenos en la Semana Santa. Es además, la penitencial que generalmente incorpora el mayor número de nazarenos en sus filas, desfilando los días de jueves y viernes santo acompañando a sus imágenes, y en domingo de ramos, domingo de resurrección, y sabado santo, cuando recorre las calles y avenidas de la ciudad en un cortejo íntimo, solemne y elegante, que da el paso a la Semana Santa, en el cual se porta a hombros la genial talla de la Dolorosa del paso del Cristo del Amor, La Virgen, y San Juan, de talla completa; Procesión tras la cual se realiza el ejercicio del Via Crucis, en el interior y los aledaños a la catedral basílica de Santander. 

El tres de agosto de 2014, la penitencial celebró su 75º aniversario de fundación, recorriendo las principales arterias del centro urbano de Santander en una solemne, sublime, e inolvidable jornada vespertina en la que la hermandad, acompañando a su virgen titular, ataviada con sus mejores galas, llevo a cabo una procesión siendo acompañada por los miembros y estandartes de las demás penitenciales de Santander, y otras cofradías de distintas partes de España y Cantabria. Cabe destacar, además, que la numerosa agrupación musical que conforma la banda de cornetas y tambores de la Cofradía del Dulce nombre de Jesús Nazareno de León, aportó un hermoso y variado repertorio que incorporaba algunas de las más célebres y bellas marchas procesionales. El cortejo se realizó después de una preciosa misa concelebrada, a la que asistieron los representantes de la Diócesis, y las otras penitenciales. 

PASOS:

-El Cristo del Amor, La Virgen, y San Juan:

El escultor Daniel Alegre Rodrigo, esculpió en maderas nobles las imágenes del Cristo del amor, (crucificado, y con actitud inerte, con la cabeza hacia abajo), realizado entre los años 1946 y 1947, y la Virgen Dolorosa de talla completa, un excelente ejemplo de policromía, en 1939. El trasmerano Victor de los Ríos Campos, finalizó el espléndido conjunto imaginero, esculpiendo y pintando la talla de San Juan en 1950. El grupo escultórico, desfila desde principios de 1950, al servicio de la penitencial. En 2005, las andas del paso fueron sustituidas por un magestuoso y precioso trono tallado en maderas nobles por uno de sus congregantes, y en 2014, la imagen del Cristo del amor fue restaurada por completo para mejorar su estado de conservación, muy deteriorado con el paso del tiempo, siendo pintado y decorado de nuevo, para la semana santa de dicho año. 

-La Santísima Virgen María de los Dolores:

 En 1941, la hermandad recibió la actual imagen titular de La Virgen Dolorosa, tallada por el escultor cántabro Daniel Alegre Rodrigo, la cual incorporaba un taciturno gesto facial que aporta a la imagen un aire de naturalidad y emoción, que evoca melancolía, tristeza...La Virgen de los Dolores luce un magnifico manto bordado en oro sobre terciopelo negro de 28 metros cuadrados realizado por las MM. Adoratrices de Santander entre los años 1945 y 1947. Desde su primer cortejo procesional, portaba también un vestido de terciopelo negro, el cual desde los últimos años suele ser sustituido el día de viernes santo por otro de color rojo, sobre el cual se situa una mantilla de seda y bordados en hilo blanco y dorado, el cual va atravesado por un magnífico puñal de oro con incrustaciones que atraviesa el corazón de la virgen. Para la extraordinaria procesión que se celebró en agosto de 2014, se encargó un vestido de tela blanca con bordados en hilo de oro, que incorporaba bordado también los emblemas heráldicos de la Hermandad de los Dolores y la Ciudad de Santander. Cabe destacar que a diferencia de la otra imagen del paso del Cristo del Amor, esta Virgen titular es una talla de vestir, por lo que solamente incorpora manos y busto en madera, y una estrucura en su interior. Porta además una soberbia corona de oro con incrustaciones, la cual destaca por encima de la mayoría de los demás elementos del paso, realizada en 1943 por el autor del trono, Domingo Mucientes.

El paso de palio es de plata y de alpaca plateada. El trono, el palio y las jarras fueron realizados por el orfebre Domingo Mucientes García, cofrade de la penitencial, quien lo elaboró entre 1946 y 1948. El palio es de tipo mixto, tiene una parte rígida, de plata rematado en la parte delantera y trasera con dos escudos de la Cofradía, y otra parte, las bambalinas, son de terciopelo negro con un remate formado por flecos de hilo de oro. El trono del mismo autor, esta formado por adornos de tema floral, con unas placas doradas en las que se representan diferentes estaciones del Vía Crucis. La candelaria también es obra de Mucientes García el cual la realizo entre los años 1947 y 1949.  Este paso a diferencia de la mayoría de los pasos de palio, tiene candelabros en las cuatro esquinas, los cuales son obra de los talleres “Bronce Arte” (1949-50), al igual que los cuatro angelotes esquineros que flanquean el paso. La artista cántabra Gema Soldevilla realizó las placas que decoran las bandas laterales del trono, representando los Siete dolores de la Virgen. Para la Semana Santa de 2014, fue incorporado además al palio del paso, un bordado que representa al Espíritu Santo sobre la efigie de María.

En el siguiente vídeo podemos observar un resumen sobre la pasada jornada de agosto en la que se celebró una solemne procesión para conmemorar el 75º aniversario de la penitencial...

GALERÍA FOTOGRÁFICA:

                                                       

                                                         

                                                                                                                                     

      

NOVEDADES 2015:

A cerca de esta penitencial, podemos adelantaros que posiblemente el vestido blanco con bordados en seda e hilo dorado, en el que figuraban los emblemas de la penitencial y el escudo de la ciudad de Santander confeccionado para la procesión que conmemoraba el 75º aniversario de la cofradía, pueda ser usado durante los días en los que la hermandad procesione a su virgen titular...

También hemos podido saber que la penitencial ha editado y publicado un gran "Libro de los Difuntos", que, en memoria de los Cofrades fallecidos, pretende dar a conocer al lector algunos de los más influyentes y relevantes congregantes que pertenecieron a la hermandad engrandeciendo su historia para el disfrute y destino de la Cofradía en los años venideros.

Además, hemos podido confirmar que a partir de esta Semana Santa, los niños y jóvenes de la penitencial, portarán en su mano una nueva vara de madera sobre la cual se sitúa un escudo de la Hermandad completamente blanco.

Durante la procesión de la Stsma. Virgen María en la Vía Dolorosa, en Sábado de Pasión, la Cofradía de los Dolores acompañará al ya tradicional paso de la Virgen, aunque un tanto modificado... Para empezar será portado por 22 costaleros; (6 delante, 6 detrás, y 5 más a cada lado del trono. Las elegantes y apropiadas andas acondicionadas para la ocasión, (una estructura de madera dorada, cubierta por faldones bordados negros), soportará la carga de las dos efigies que se portarán durante la procesión. Como viene siendo ya habitual durante los últimos años, se llevará la imagen de la Virgen, (Paso del Cristo del Amor, la Virgen y San Juan), ataviada con un sobrio y austero a la par que solemne manto azul, (aun no siendo de vestir), aunque no en la misma posición que otros años. La virgen, fijará su mirada sobre el cadáver crucificado de su hijo, que yace sobre la cruz notablemente tumbado y caído, sobre un montículo de flores y helechos, que aportan a las tallas una incomparable sensación de naturalidad y realismo... Lo que embellece y mejora notoriamente el estilo y la imagen de esta singular y solemne procesión vespertina, propia de esta Cofradía.

Será lucida otro año más la efigie de vestir de la titular de la Hermandad, la Stsma. Virgen de los Dolores, aunque con una nueva y peculiar característica. Normalmente es difícil de apreciar y notar, pero el resultado es magnífico y asegura obviamente la preservación artística de la imagen. Yes que hace unos meses, la talla de la Dolorosa fue enviada a la ciudad de Sevilla, para allí serle aplicado un lavado de rostro e imagen, a parte de una pequeña aunque necesaria restauración parcial, donde se aclararon los tonos de la tez de la efigie, la pintura, la expresión... Además esta imagen lucirá durante su estancia en la carpa de exposición de pasos su vestido con bordados rojos, que destaca la figura.

Se han restaurado los varales y parte de la candelería del magnífico trono de palio de la Virgen titular, habiendo sido aplicados sobre ellos un baño de plata nuevo.

Seguiremos informando a cerca de esta Cofradía...